Nosotros | Donde la Mery

Nuestro refugio

Desde 2003 Rescatando y cuidando animales

Nuestra historia

Nuestros rescates comenzaron el año 2003, cuando compré (Myriam) una perrita mestiza en el Paseo Ahumada (Santiago). El vendedor dijo que era cocker spaniel y la traía al interior de su mochila, ella tenía 1,5 meses, le habían cortado la cola y tenía una barriga enorme.

Convencí a mi madre (Mery) de que la perrita era cocker y me permitió dejarla en el departamento. Dos días después ella comenzó con una crisis de parásitos y estuvo hospitalizada por una semana, luego se recuperó. Fue nuestra primera perrita, la llamamos Annie, luego Mery rescató a Grace y Jack, dos doberman de 1 mes desde el contenedor de la basura del edificio. Pasaron los meses y se fueron sumando Flavio, Analice, Rafaela, Camila, etc… el departamento nos quedó chico, nos cambiamos a una casa, luego a otra más grande hasta que finalmente decidimos arrendar una parcela. En 2012 tomamos la decisión de hacer el refugio “Donde La Mery”. No fue una decisión fácil, pues significó dejar nuestros proyectos de vida a un lado para priorizar a nuestros rescatados. Nuestro trabajo y responsabilidades aumentaron, pero se sumaron personas maravillosas para ayudarnos. Afortunadamente la sociedad cambió y la Ley también, a raíz de esto a finales del año 2018, dimos el gran paso y nos constituimos como Fundación Sin Fines de Lucro, adoptando el nombre de Fundación Refugio Animal Donde La Mery.

Ahora con 225 perritos y 23 gatitos a nuestro cuidado, nos toca el siguiente paso, tener nuestro propio terreno donde construir nuestro refugio definitivo con caniles más grandes e instalaciones para recibir a nuestros voluntarios.

Que nos motiva

Nuestra misión

Como fundación tenemos la misión de rescatar, cuidar y acompañar a un sin número de animales que pueden estar enfermos, atropellados, sufriendo maltrato. Realizamos los tratamientos necesarios para cada caso, hacemos todo lo que está a nuestro alcance para que reciban la mejor atención posible para luego realizar un minucioso proceso de adopción que nos asegura encontrar los mejores adoptantes para nuestros pitufos con el amor incondicional que merecen y la mejor calidad de vida posible. Tenemos la esperanza de que algún día refugios como este, ya no sean necesarios.